RAUL CUBO ARQUITECTO
LA CIUDAD RENTABLE
CONCURSO DE IDEAS DEL JUEGO DEL PRONTUARIO SIKA
equipo_ Raúl Cubo _ Álvaro Cuartero _ Beatriz del Castillo _ Guillermo Godino _ Ioannes Busca _ Gregorio Pizarro
fecha_ junio 2008
Instrucciones para rentabilizar de forma sencilla su ciudad
¿Cansado de la poco rentabilidad que le ofrece su ciudad?
¿Harto de la impotencia de querer o convertir su ciudad en un enorme cartel publicitario y no poder hacerlo por tener que sucumbir a los llantos de una mayoría de votantes que si bien le dan su consentimiento para gobernar la ciudad, no le permiten hacerlo desde la sabiduría de su puesto y le obligan a regirse por anticuadas leyes sobre el decoro y el bien hacer?
¿No sabe de donde sacar dinero para iniciar y continuar numerosas obras que nunca acabaran y que le permitirán tener contentos a sus amigos los constructores?
¿Quiere llenar sus bolsillos, y los de sus amigos los empresarios?
¿Desea aun así tener contentos a los votantes para poder ser reelegido y continuar cuatro años más con su reinado de locura socavones y obras interminables?
¡No lo dude más¡ Inicie hoy mismo el sencillo método de Renovación Urbanística Publicitaria que la prestigiosa empresa de desarrolladores C.O.L.O.R. pone a su disposición. Este ingenioso método consiste en un radical a la vez que sutil cambio en su ciudad, permitiendo llenar esta de publicidad, ¡con la increíble suma de dinero que ello conlleva¡
Y ¿cómo podré llevar esto a cabo? ¿Cómo podré contentar a la vez a los fieros empresarios y a la sensible masa?, se preguntara usted. ¡Muy fácil¡ La respuesta es fruto de años de investigación en torno a la publicidad, que nos remiten irremediablemente a la raíz de ella, a los simples logotipos publicitarios y su espléndido colorido, a los símbolos multinacionales, al auténtico lenguaje internacional, a la novedosa imagen de marca.
Si llegado a este punto todavía se pregunta como va a lograr este portento, como va a conseguir ocupar el suelo público y vendérselo a las empresas privadas sin tener que enfrentarse a manifestaciones en contra de la incursión privada encabezadas por dementes que hablan en nombre del buen gusto y la decencia, si solo de pensarlo le parece oír el clamor de la multitud pidiendo su cabeza; la respuesta es muy simple: ahí fuera, en la calle se encuentran numerosos elementos públicos, que por su colorido son objetivo de la publicidad. Buzones, semáforos, paradas de autobús, estaciones de metro, todos ellos han sido tratados hasta ahora como simples soportes en los que colocar los llamativos, a la vez que anticuados carteles publicitarios. En nuestra propuesta estos siguen siendo objeto de la publicidad pero de una forma más significativa a la vez que inapreciable, permitiendo que ostenten su despreciable pero necesario significado actual, a la vez que dan paso a fines más pragmáticos. Piense en un semáforo, piense en su imponente luz roja, impidiéndole el paso, ordenándole pararse, haciéndole perder tiempo. Vea ahora como cambia, con el simple hecho de sustituir el rojo abstracto del semáforo por el imponente y distinguido símbolo de coca cola. Ahora el tiempo de espera se convierte en algo dinámico, vertiginoso. ¡Un pequeño Picadilly Circus en cada semáforo! ¡Y observe ahora como la luz que le permite seguir su camino es ahora el verde de Heineken, como los múltiples electores en sus coches baratos babean ante la nueva señal que les invitar a una orgía de diversión, chatarra de coche y intoxicaciones etílicas! ¡Más madera, es la guerra! Y todo ello gracias al imaginativo desarrollo de la empresa C.O.L.O.R., la empresa que logró legalizar la zoofilia sin alterar en absoluto a los más puritanos.

